jueves, 3 de diciembre de 2009


Vista actual de Luján. La ciudad de Luján ya pertenecía a la provincia de Buenos Aires hacia 1820.

lunes, 23 de noviembre de 2009

El territorio argentino a partir de 1850

Con la sanción de la Constitución de 1853, se definió la forma de gobierno de la Argentina y las leyes que regirían en el territorio. Pero el país no estaba unificado: entre 1853 y 1860, coexistieron en el territorio dos unidades autónomas: por un lado, la provincia de Buenos Aires, y por otro, la Confederación argentina.
Luego de la batalla de Pavón, en 1861, Buenos Aires se unió a la Confederación. Con un Estado unificado, los gobernantes de entonces quisieron ampliar el territorio y dominar las zonas que hasta ese momento habían sido habitadas por los pueblo aborígenes.

La ocupación de las tierras indígenas

Una de las razones por las que los gobernantesquerían adueñarse de las tierras indígenas era contar con más campos para la cría de ganado y así ampliar la producción de cuero y carne salada para vender a Europa.
Para llevar a cabo la tarea de dominación de esas tierras, los gobiernos organizaron campañas militares. En 1879, Julio A. Roca encabezó la llamada "Conquista del desierto", gracias a la cual el gobierno nacional incorporó los territorios indígenas de la Patagonia. Otra, conocida como la "Campaña al Chaco", fue llevada adelante en 1884 por el general Benjamín Victorica, quien ocupó las tierras ubicadas al nordeste del país.

El "desierto"


La zona sobre la que avanzó el ejército al mando del general Roca estaba lejos de ser un desierto; por el contrario, estaba habitada por numerosos grupos indígenas. La conquista de esos territorios provocó la prisión y la muerte de miles de indígenas.
Los territorios que hasta ahora habían estado bajo el dominio de los pueblo originarios fueron repartidos entre unos pocos estancieros vinculados con el gobierno, lo que determinó una importante concentración de la tierra.

La federilización de Buenos Aires

La consolidación del Estado nacional no significó que los problemas en las provincias se resolvieran por completo. De echo, entre 1874 y 1880, el gobierno de la provincia de Buenos Aires y el de la Nación de enfrentaron por varios motivos. Uno de ellos era que la Argentina, por esos años, carecía de una capital definida donde establecer su sede. Debido a ello, las autoridades nacionales los recibían como "huéspedes" en la provincia de Buenos Aires, lo que generaba conflictos entre el presidente y el gobernador.
En 1880, el entonces gobernador de Buenos Aires, Carlos Tejedor, fue autorizado por la Legislatura a invertir dinero para la conformación de milicias provinciales. Nicolás Avellaneda, presidente del país en ese momento, pidió a Tejedor que diera marcha atrás con esa medida pero, ante la negativa de este, decidió trasladar la sede de la capital al pueblo de Belgrano (actual barrio de Belgrano de la Ciudad de Buenos Aires). Finalmente, en septiembre de 1880 el Congreso Nacional sancionó la ley que declaró a la Ciudad de Buenos Aires capital de la Argentina.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Los territorios nacionales

Una vez finalizadas las campañas militares de ocupación de tierras indígenas, esas zonas fueron anexadas como territorios nacionales. Estos territorios no tenían un gobernador como los que tenían las provincias, sino que dependían directamente del gobierno nacional. La ley de 1884 que creaba los territorios nacionales también puntualizaba que esas zonas podrían ser declaradas provincias cuando tuvieran más de sesenta mil habitantes censados.

Muchos años después –entre 1951 y 1958-, estos territorios se convirtieron en las actuales provincias de Misiones, Formosa, Chaco, La Pampa, Río Negro, Chubut y Santa Cruz. El último territorio en provincializarse fue la actual provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, en 1991.

El territorio argentino en la actualidad

La República Argentina está integrada por 24 jurisdicciones (23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires). Como saben, la Constitución de 1853 establece que la Argentina tiene un gobierno representativo, republicano y federal.

- Representativo, porque los ciudadanos del país delegan el poder en representantes que eligen por medio del voto.

- Republicano, porque los gobernantes son elegidos por el pueblo y, además, porque en una república existe la división de poderes: Ejecutivo, a cargo del presidente de la nación, el vicepresidente y los ministros; Legislativo, ejercido por el Congreso Nacional, donde trabajan los diputados y senadores; y Judicial, ejercido por tribunales integrados por jueces.

- Federal, porque cada provincia y la Ciudad de Buenos Aires tienen su propia constitución y gobierno ejercido por los poderes Ejecutivo (gobernador o jefe de gobierno), Legislativo (diputados y senadores provinciales o legisladores) y Judicial. Esto significa que cada jurisdicción promulga las leyes que van a regir en su territorio y elige a sus propios gobernantes; esto no quita que las jurisdicciones deben subordinarse a las autoridades nacionales.